28 personas han muerto de sobredosis en las prisiones de Tennessee este año. Las demandas culpan a la falta de personal y a los medicamentos fácilmente disponibles.

Más de dos docenas de personas han muerto por sobredosis tras las rejas en Tennessee este año. Doce de esas muertes ocurrieron en prisiones privadas, administradas por CoreCivic, con sede en Brentwood.

CoreCivic alberga a menos de la mitad de la población carcelaria del estado y ha tenido una parte proporcional de las muertes por sobredosis este año. Pero la empresa, que administra prisiones en todo el país, se ha visto afectada por varias demandas a lo largo de los años alegando atención insuficiente.

Uno de los más recientes detalla la muerte por sobredosis de dos hombres.

A los 37 años, la salud de Joshua William se estaba deteriorando. Las fotos tomadas dentro del Centro Correccional South Central con un teléfono celular de contrabando muestran sus piernas y pies cubiertos de manchas de color púrpura rojizo debido a una infección.

Sus padres se comunicaron con los funcionarios de la prisión y dijeron que Williams tenía dolor y necesitaba atención médica.

“No queremos una demanda ni dinero después de su muerte”, escribió su madre en un correo electrónico, incluido en la demanda. “Queremos que cuides de nuestro hijo ahora”.

Pero Williams murió unos días después. Sus padres dicen que probablemente tomó fentanilo para aliviar su dolor y tuvo una sobredosis.

Chriteris Allen tenía 22 años cuando murió de una sobredosis de fentanilo dentro del Centro Correccional de Whiteville. En lo que va de año, cinco personas han sufrido una sobredosis dentro de esa misma instalación.

La demanda alega que los guardias de CoreCivic no encontraron su cuerpo durante horas. Dice que la falta de controles de celda se debió a que no tenían suficiente personal. Su madre se pregunta si la sobredosis podría haberse revertido si Allen hubiera sido encontrado antes.

Williams y Allen estaban entre las 49 personas que murieron por sobredosis mientras estaban encarceladas en Tennessee el año pasado. Casi todos ellos eran del opioide altamente potente, fentanilo.

CoreCivic dice que no puede comentar sobre los litigios actuales, pero agrega que la seguridad de las personas encarceladas en sus instalaciones es una prioridad.